En julio de 2021, cuando el Gobierno empezaba lentamente a liberarnos y había funciones de cine, con restricciones -¿se acuerdan?- se estrenaba Nadie, una comedia de acción protagonizada por Bob Odenkirk, el abogado de Breaking Bad y Better Call Saul.
Tal vez de ello es lo que no se acuerdan: estuvo dos semanas en cartel en la Argentina, y la vieron 14.000 espectadores.
Qué hacer si no viste la primera
El asunto es que, si uno no es uno de los que sí vio Nadie, se va a quedar bastante afuera de lo que cuenta Nadie 2.
Porque Nadie 2 es como esas series en streaming, que inicia una nueva temporada, pero ni siquiera le hacen al comienzo del primer episodio un recordatorio de lo que pasaba en la anterior.
Así que les resumo: en la primera, Hutch Mansell era un dócil, sumiso padre de familia que revela su verdadero carácter luego de que dos ladrones asaltaran su casa, y terminaba en una sangrienta guerra con un jefe criminal ruso.
Ahora sí, van a entender mejor Nadie 2.
Que empieza rara, comienza casi por el final, para retroceder en el tiempo sin que medie aviso alguno al espectador.
Los mata bien muertos
Hutch se ha vuelto un adicto al trabajo. Logró que su esposa Becca (Connie Nielsen) y sus hijos Brady (Gage Munroe) y Sammy (Paisley Cadorath) lo respeten, pero no puede desconectarse de lo suyo.
Lo suyo es ser un asesino, en este caso, con una deuda millonaria.
Para saldarla, debe aceptar más y más encargos, trabajitos que ponen en peligro su vida, aunque no muestre muchas muecas que expresen dolor.
Y Hutch, algo pinchado por su mujer, decide que llegó el momento de salir de vacaciones, y lleva a la familia a un parque acuático, que le encantaba visitar de chico, con su padre (Christopher Lloyd, el Doc de Volver al futuro, que vuelve también a ser de la partida), y su hermano Harry (el rapero y actor RZA, otro que regresa).
Como corresponde, a poco de llegar Hutch se descontrola ante agresiones a sus hijos, hasta descubrir que el parque acuático es en verdad un centro de un imperio criminal, que cuida un sheriff corrupto, Abel (Colin Hanks, hijo de Tom Hanks, reconocerán enseguida el parecido físico, ya que no el interpretativo), y una capa de la mafia, Lendina, tan sanguinaria inescrupulosa y caricaturesca al que una algo irreconocible Sharon Stone le pone todas las ganas.
Bob Odenkirk, a lo Keanu Reeves en «John Wick»
Así que Hutch vuelve a la pelea, generalmente en desventaja cuando intentan matarlo a él y a su familia. Una suerte de John Wick, pero con algún remordimiento. O no.
Nadie, la primera, era más cínica. Esta tiene otro director y es más una de acción con comedia que vimos varias veces.
Las acciones del director indonesio Timo Tjahjanto vienen tan en alza que entre sus próximos proyectos en Hollywood están la secuela de Beekeeper: Sentencia de muerte, con Jason Statham, y el remake de Train to Busan (o Invasión Zombi en la Argentina), la película coreana que se llamará The Last Train to New York.
Si les pone tanta acción y tanto humor como en Nadie 2, habrá que ir a verlas.
«Nadie 2»
Buena
Comedia / Acción. EE.UU., 2025. Título original: “Nobody 2”. 89’, SAM 16. De: Timo Tjahjanto. Con: Bob Odenkirk, Connie Nielsen, Christopher Lloyd, Sharon Stone, John Ortiz. Salas: Hoyts Abasto y Unicenter, Cinemark Palermo, Cinépolis Recoleta, Showcase Belgrano y Norcenter.