El comportamiento de la jueza Julieta Makintach suma reproches. Un día después de que se declarase nulo el debate por la muerte de Diego Armando Maradona tras aparatse del tribunal a esa magistrada, otro pedido de juicio político aumenta la presión sobre quien tenía pensado ser la protagonista de un documental sobre las audiencias del caso.
“A partir de los graves hechos que son de público conocimiento, el Consejo Directivo del Colegio de Abogados San Isidro ha tomado la decisión de constituirse en denunciante y promover el juicio político de la doctora Julieta Makintach”, informó en un comunicado de prensa la entidad que agrupa a los profesionales de Derecho.
Con esa presentación, ya son seis los pedidos de destitución por mal desempeño que enfrenta al magistrada que quedó en el foco de la polémica al ser investigada por la filmación ilegal llevada adelante en las audiencias del caso Maradona. Entre quienes promovieron el juicio político de Makintach se encuentra el abogado Fernando Burlando, que representa a Dalma y Gianinna Maradona.
Durante las últimas horas, el jefe de los fiscales y defensores bonaerenses, Conte Grand, solicitó a la Suprema Corte de Justicia provincial que remita las grabaciones de las audiencias del juicio oral contra los siete acusados de la muerte de Maradona, en las que intervino la jueza Makintach y la copia de sumario que se instruye en la Unidad Funcional de Instrucción (UFI) N°1 de San Isidro, por la denuncia por presunta mal desempeño contra la magistrada presentada por los abogados Mario Baudry y Burlando.
El acceso al material audiovisual de la totalidad de las audiencias del juicio que registró la subsecretaria de Comunicación y Medios de la Suprema Corte de Justicia a cargo de Ezequiel Klass ya fue puesto a disposición de los funcionarios del área de Control Disciplinario y Enjuiciamiento de Procuración.
Con todos estos elementos, la Procuración deberá evaluar si existen fundamentos para presentar la denuncia contra la magistrada en la Comisión Bicameral de Enjuiciamiento.
Por su parte, la Suprema Corte de Justicia de la provincia de Buenos Aires había decidió imponer una licencia obligatoria de 90 días a la cuestionada jueza. En la práctica, esa resolución del máximo tribunal bonaerense representa una suspensión de hecho para Makintach.
En caso de que se acelere el proceso de apertura del Jurado de Enjuicimiento, el margen de maniobra de la jueza será cada vez más restringido. Por ejemplo, no podrá renunciar si se declara admisible alguno de los pedidos de juicio político.
El escándalo alrededor del caso Makintach crece cada día.