El imparable éxito masivo de la música urbana en Argentina tuvo por fin su gran festival lleno de figuras que en los últimos años se convirtieron en los artistas más populares del país y de Hispanoamérica, por ejemplo los argentinos Bizarrap, Duki, Nicki Nicole, Milo J, Cazzu y el estadounidense Eladio Carrión.
Se trata de Buenos Aires Trap, un encuentro que tuvo dos ediciones en 2019 en el Hipódromo de Palermo, y otra en versión virtual en plena pandemia de 2020. Recién ahora, cuatro años después, llega la cuarta edición en el inmenso pedio del Parque de la Ciudad, con decenas de artistas que en ese lapso crecieron de manera meteórica y hoy son grandes figuras con reproducciones y visualizaciones millonarias.
La respuesta del público a la propuesta fue masiva, y en la primera fecha del sábado 7 hubo más de 50 mil personas. Se espera una cifra similar para el domingo 8, donde el cierre estará a cargo del consagrado productor Gonzalo «Bizarrap» Conde.
Una mini-ciudad
Tal como ocurre en festivales de esta dimensión, el lugar elegido se convirtió en una suerte de mini-ciudad por dos días, lo cual requirió un intenso trabajo de relevamiento, planificación y construcción no sólo de escenarios, sino de áreas gastronómicas, venta de merchandising, sanitarios, puestos de hidratación, parking, puntos de encuentro, iluminación, señalización, Internet, accesos de proveedores y seguridad.
Además, para facilitar la desconcentración y el regreso, el Gobierno de la Ciudad extendió el horario del subte y los organizadores pusieron buses gratuitos para ir a lugares como la estación Hospitales, Once, Retiro y Constitución.
Como también es habitual, las grandes marcas se hicieron presentes, cada una con sus stands de «activaciones» llamativas, desde terrazas VIP hasta sectores de relajación tipo chill-out, y actividades para divertirse (por ejemplo un laberinto con forma de zapatilla) o ganar premios. Mención especial para las promotoras de protector solar, un elemento más que necesario para las largas jornadas a todo sol.
El marco del viejo Parque de la Ciudad, que fue un auténtico parque de diversiones entre 1982 y 2003, le dio un tono de fantasía retrofuturística por la presencia de icónicos juegos abandonados, como la extensa montaña rusa, las garras del Escorpión, una vieja calesita y la enorme torre de 210 metros, todo rodeado de árboles, lagos artificiales y la gran fuerte de agua de la entrada.
Desde el mediodía mismo, cuatro escenarios fueron iniciando su sucesión de shows. Arrancó primero el pequeño Barras Stage, donde hubo batallas de crews y para el cierre estaba anunciada la popular DJ Mami. A las 13, en el otro extremo del parque, dio inicio el inmenso Brahma Stage con Tizishi, por donde luego desfilaron Turrobaby, Saramalacara, Lit Killah y C.R.O.
A las 13.30 subió Sixto Yegros al otro escenario principal, Mercado Libre Stage, ubicado exactamente al lado del Brahma y adonde tocaron Acru, Asan y Bhavi, antes del cierre con Nicki Nicole y Duki. También a las 13.30 comenzó la seguidilla de artistas en Hispa Stage, por ejemplo Ramma, Young Cister y Zeballos.
Son las 20:45 y la ansiedad lo tiene fácil porque uno de los platos fuertes la noche sucede justo a tiempo. Una base marchosa viste el aire, las pantallas muestran el logo de “Naiki” en plan grafitero old school. Nicki Nicole, agazapada en su outfit de sobrio gris, hace explotar al público con solo darle las buenas noches.
(informacion adicional: Adriano Mazzeo)