Las legumbres han sido una parte fundamental de la alimentación humana desde tiempos antiguos, ofreciendo un valor nutricional excepcional que a menudo pasa desapercibido en la dieta moderna. A pesar de su importancia histórica y su destacado perfil nutricional, la ingesta de legumbres a menudo se ve relegada en las dietas contemporáneas.
Sin embargo, estas pequeñas semillas de plantas leguminosas ofrecen una serie de beneficios tanto para la salud como para el medio ambiente que merecen ser destacados y considerados en la alimentación diaria, especialmente cuando hablamos de la anemia y la falta de hierro.
Las legumbres, que incluyen frijoles secos, lentejas y guisantes, son una excelente fuente de nutrientes, vitaminas y minerales esenciales para una dieta equilibrada, según detalla el Servicio de Información Agroalimentaria y Pesquera de México. Además de su valor nutricional, las legumbres desempeñan un papel crucial en la agrobiodiversidad y la resiliencia al cambio climático. Su capacidad para fijar nitrógeno en el suelo mejora la fertilidad y contribuye a la sostenibilidad de los sistemas agrícolas.
Recientemente, el Fondo Mundial para la Naturaleza identificó las legumbres como uno de los 50 alimentos del futuro, destacando su valor nutricional, su bajo impacto ambiental y su accesibilidad. Este reconocimiento subraya la importancia de las legumbres en la transformación de los sistemas alimentarios hacia una mayor sostenibilidad y salud.
Entre las variedades de legumbres que se han destacado como alimentos del futuro se encuentran los frijoles adzuki, los frijoles negros, las habas, los cacahuetes bambara, el caupí, las lentejas, los frijoles marama y los frijoles mungo. Estas legumbres no solo son ricas en proteínas, fibra y otros nutrientes esenciales, sino que también son versátiles en la cocina y pueden cultivarse en una variedad de condiciones climáticas y suelos.
Y entre esas legumbres, las lentejas han destacado por su capacidad para aumentar los niveles de hierro en el organismo y prevenir la anemia. Las lentejas, pertenecientes a la especie Lens culinaris, son originarias del norte de África y Asia, y han sido cultivadas durante siglos debido a su destacado perfil nutricional y su versatilidad en la cocina.